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El chaga(Inonotus obliguus, clinker polypore, hongo del abedul, tschagapilz, Hua Jie Kong Jun) pertenece a los hongos destructores de la madera. Es plurianual y produce dos tipos de cuerpos fructíferos, sexuales y asexuales. Tras infectar un árbol, produce cuerpos fructíferos "hendidos" de color negro oscuro que contienen clamidosporas, es decir, esporas. Estos cuerpos fructíferos pueden sobrevivir varios años y tienen un tamaño de entre 10 y 35 cm. Más tarde, cuando el hongo madura y el árbol infectado por cuyo tronco ha crecido el hongo muere, se desarrolla un segundo tipo de cuerpos fructíferos que contienen esporas sexuales, las basidiosporas. Este cuerpo fructífero es más grande y puede alcanzar varios metros de longitud. El chaga parasita principalmente árboles de hoja caduca, sobre todo abedules, de los que también obtiene el importante ingrediente betulina.
El chaga está muy extendido en el hemisferio norte. Es muy conocido en Rusia, donde también forma parte de la medicina tradicional rusa. Sin embargo, es igualmente conocido en la medicina tradicional china.
El hongo se conoce desde hace unos 4000 años, utilizado por los mesopotámicos, egipcios, chinos, etc. El chaga también se describe en el "herbario" chino Shen Nong Ben Cao Jing. También la menciona Solzhenitsyn en su libro Cáncer. El chaga no era desconocido para los habitantes originarios de Japón, es decir, los ainu. Y también utilizaban el polvo del hongo seco no sólo para ceremonias religiosas.
Pero el chaga también era conocido por los indios de Norteamérica.
En la historia moderna, el chaga ha sido estudiado desde 1864 por J. G. N Dragendorff en San Petersburgo. En el siglo XX se produjeron avances significativos en el estudio de los hongos, se reveló su composición y comenzó a estudiarse científicamente.
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